durmiendo con el enemigo |
Es curioso como puedes
dormir con alguien y no sentir nada.
y por nada me refiero
a no pensar en él después,
a que de alguna
manera misteriosa ni siquiera su olor
permanezca contigo.
Es curioso como puedes dormir con alguien,
tenerlo adentro tuyo
y no sentir nada.
Sin hablarse, sin
besarse en la boca, porque así debe ser,
como mera terapia, simplemente para dejar de pensar.
Porque en la cama se ve lo mejor o lo peor de cada
persona.
A veces te
sorprendes.
Vestirse rápidamente,
y que poco entiendan tu indiferencia
por su existencia,
y que le frustre
porque no entiende que no lo quieras,
aunque el mismo no te
quiera,
y que lo que sientas
no es que lo sientas,
sino que sientes no
sentir.
Es más curioso cuando después de mucho tiempo,
escuchas su nombre y
sientes un espasmo